Cómo evitar el crecimiento del moho, es decir, la marcación del punto de rocío

El conocimiento sobre el punto de rocío es útil para la cría, cultivo, secado, pintura, construcción y también a la hora de seleccionar los materiales de construcción. Es muy importante en la planificación de procedimientos que se vayan a realizar, para evitar la formación de moho y óxido. El conocimiento y la comprensión de la función de la temperatura del punto de rocío es importante no solamente desde el punto de vista de la ingeniería o meteorología.

Qué es la temperatura del punto de rocío

El punto de rocío y más específicamente, la temperatura del punto del rocío es la temperatura límite, en la que el gas alcanza saturación máxima. Debajo de la temperatura del punto de rocío se realiza la conversión en de gas a líquido, es decir, la transformación de la condensación o eventualmente, la transformación directamente en cuerpo sólido, es decir, resublimacion. La determinación precisa de la temperatura del punto de rocío requiere la determinación de la presión y la determinación de la composición química del gas. La definición mencionada anteriormente se aplica tanto al gas como al vapor. Los fenómenos de la evaporación, condensación y ebullición son procesos físicos, por tanto, comunes con los que nos encontramos en la vida cotidiana.

En el contexto de la mezcla de aire y del vapor, la temperatura del punto de rocío es la temperatura donde se acumula el vapor en el aire y no permanece en forma de gas y se condensa (rocío, niebla, hielo). La influencia de la temperatura del aire es sumamente importante, debido a que su aumento provoca que el aire caliente contenga mayor cantidad del agua que el aire frío, con el mismo nivel de humedad relativa. Hay que recordar que la humedad relativa también describe el contenido del agua (vapor) en el aire, pero no describe con la misma precisión el nivel de humedad del aire igual que el punto del rocío.

Definición de la temperatura del punto de rocío

De la dependencia física resulta que la temperatura del punto de rocío determina la humedad relativa del aire, la temperatura del aire y la presión atmosférica. La humedad relativa expresada en porcentajes varía no solamente de unos cuantos hasta 100%. El ampliamente reconocido rango comercial de temperatura va de -5°C a +70°C, y el rango industrial de –25°C a +85°C. La variación más pequeña indica la presión y a menudo se supone que es estable en la estimación del punto de rocío. Por lo tanto, los valores más simples y las tablas representan solamente la relación entre el punto del rocío, la temperatura y la humedad.

La dependencia física nos conduce a los siguientes hechos:

• La temperatura del punto del rocío es más alta, en cuanto es mayor la temperatura del aire que contiene el vapor,
• el aumento de la humedad relativa del aire baja la temperatura del punto de rocío,
• el aumento de la presión baja la temperatura del punto de rocío,
• cuanto mayor la humedad relativa, más baja será la diferencia entre la temperatura del aire y la temperatura del punto de rocío,
• A una temperatura de 100ºC y con la humedad relativa del 100%, la temperatura del punto de rocío es la misma que la temperatura del aire, pero en cualquier otro caso la temperatura del punto de rocío es inferior a la temperatura del aire.
• La temperatura del punto de rocío puede ser menor que cero en caso en que la temperatura del aire y la humedad relativa sean adecuadamente bajas (p.ej. en caso de que la humedad relativa sea inferior al 50% y la temperatura más baja a 10ºC, el punto de rocío se encontrara por debajo de 0ºC, en cambio en la temperatura ambiente de 22ºC el punto de rocío será igual a 0ºC para la humedad relativa del aire alrededor del 20%).

La temperatura del punto de rocío para aire húmedo se determina en base a:

• tablas comúnmente disponibles,
• lecturas de cartas de Mollier,
• cálculos basados en la divergencia de Magnus,
• mediciones mediante higrómetros.

Lugares expuestos a la reducción de la temperatura por debajo del punto de rocío

La formación del rocío o la condensación del vapor en superficies que están más frías que su entorno es un fenómeno común y, a menudo muy indeseable. El problema de la condensación espontánea causada por la reducción de la temperatura se produce muy a menudo en la ingeniería estructural. Se aplica, principalmente, en lugares que puedan estar expuestos a diferentes temperaturas, tales como ventanas, marcos de puertas y ventanas, elementos de construcción, fragmentos de fachada y techos. En caso de que los elementos de construcción mencionados estén expuestos al contacto con la temperatura exterior y del interior del edificio, entonces en los lugares con la temperatura bajada aparecerán las gotas de agua. Eso se debe al hecho a que, puntualmente, bajó la temperatura del aire por debajo de la temperatura del punto de rocío.

Punto de rocío y la formación de puentes térmicos

Todos los lugares que están expuestos a los efectos de la temperatura y tienen una conductividad térmica relativamente alta se llaman puentes térmicos. Estos son los elementos de construcción muy desfavorables desde el punto de vista del aislamiento térmico. A través de los puentes térmicos aparece una disipación intensa del calor del edificio. Tales elementos se caracterizan por el hecho de mantener la temperatura mucho más baja que la temperatura media en el interior del edificio. Además, los puentes térmicos reducen la efectividad del aislamiento de todo el edificio provocando, también, la aparición de rocío en las superficies en el interior del edificio. La humectación prolongada e intensa de la superficie de los puentes térmicos provoca un aumento de corrosión de los elementos metálicos y a la nucleación del moho y hongos. El lugar más desfavorable a la formación de los puentes térmicos son las superficies interiores de paredes de varias capas, áticos y también construcciones metálicas con aislamiento inadecuado. En tales casos las frecuentes variaciones de temperatura dan lugar a procesos de corrosión severa y la nucleación de hongos que son difíciles de identificar y eliminar.

Siendo consciente de que la condensación se forma como resultado de la bajada local de temperatura por debajo del punto de rocío, se pueden ubicar las áreas del edificio en las que se condensa el vapor del agua y las que son los puentes térmicos naturales. Cuanto mayor sea la humedad de dichas áreas, la disipación del calor será más intensa. Por lo tanto, es importante contrarrestar la aparición de tales áreas durante la fase de construcción y eliminarlos durante el acondicionamiento del edificio. Esto reducirá el coste de energía térmica y limitará cualquier proceso no deseado.

Consulta también:

Pirómetro AX-7600 – inalámbrico para medición de temperatura y del punto de rocío.